Nota: A raíz de la publicación de la Nota de Prensa de marzo de 2011 sobre el terrible terremoto que asoló Japón, se ha entendido que existía un apartado que no se había contemplado dentro de las etiquetas de este Blog, aún siendo tangente al "Por el principio", y que representaba un punto interesante para conocer y entender más aún Hattrick y a este equipo: La dualidad e interferencia entre la realidad y la virtualidad.
Por ello se publica ahora, algo tarde es cierto, este post inaugural pertenceciente a la blogstories que generaron este Blog, en esta etiqueta tan sutilmente denominada "Dos Mundos", para adentrarnos en este apasionante paralelismo...
Existen
dos mundos: El “real” y el de Hattrick.
Y
existen dos tiempos.
En
el universo real el tiempo se mide en siglos, años, meses, semanas,
días, horas, minutos, segundos, décimas y hasta en milésimas si se
trata de ver quién corre más o nanosegundos si se trata de saber
cuándo empezó el bigbang. (¿se puede escribir con minúsculas?).
Y por supuesto en función de las coordenadas respecto
al meridiano de Greenwich, es decir GMT.
En
Hattrick es algo distinto: los años se sustituyen por
temporadas y las temporadas se dividen en semanas. Pero en sólo 16
semanas. Las semanas, sí, tienen también 7 días, pero con un valor
distinto: el sábado hay partido y lo es todo y el miércoles se
juega copa o entrenamiento, los viernes se cobra y los domingos... no
pasa nada de nada. Ni siquiera se descansa.
Los
minutos sólo existen para contar lo que falta hasta que el árbitro
pite el final del partido.
Y
los segundos son simplemente los que ayudan el entrenador...
Ah,
y una cosa muy importante en Hattrick no se pierde el tiempo. Nunca.
Por eso los partidos, siempre, duran 90 minutos. No importa si
llueve, si hay lesionados o si el portero tiene que entrar 11 veces a
a sacar el balón del fondo de las redes. Siempre duran 90 minutos,
salvo prórroga, y empiezan a su hora y nadie se retrasa.
Es
más si te retrasas en dar la alineación, a la hora exacta Hattrick
pone otra alineación por defecto, y sigue.
Es
lo que se conoce como Hattrick Universe Time (HUT).
Si contáramos con el talento del matemático de Stanford que calcula las puntuaciones y cortes de la Fedex Cup seguramente se podría desarrollar una ecuación para establecer qué fecha de uno corresponde al otro.
Pero, tampoco tendría mucha utilidad salvo que se editara una versión llena de virtualidad del Santoral Diocesano o del Calendario Zaragozano. Aunque este último tendría más sentido para conocer la predicción del "otro" tiempo, el climatológico. Que cada vez tiene más de clima y menos de lógico. Pero ese otro tipo de tiempo, como decía el tabernero de Irma la Dulce, "es otra historia", que abordaremos en otra ocasión.
Volviendo a las líneas temporales, lo importante no es conocer la correspondencia entre ambas, sino más bien la interferencia. Cuándo ambas lineas se entrecruzan.
Unas veces como en este caso del desastre natural mencionado la "realidad" invade los ánimos del mundo virtual y se hace necesario que ambos mundos coincidan. Y que las heridas de uno se puedan empezar a curar con un pequeño gesto del otro.
En otras ocasiones lo que coinicide es una época del año o una festividad señalada. En el mundo Hattrick los seres virtuales no miran mucho más allá de los hitos semanales o del final de la temporada para saber si suben o bajan y por ello no les importa celebrar el día del Padre cada cuatro ciclos o que la navidad caiga más allá o más acá. Lo importante es celebrarlo.
Finalmente en alguna ocasión son los hechos y acontecimientos de la vida personal del Creador, (¿redactor/gestor?), los que al afectarle se reflejan en el devenir del equipo y su historia. Y también, como en los otros casos, quedan plasmados en la notas de prensa, publicaciones, posts, reseñas y demás de este Blog.
Saber cuándo ha sido un tipo u otro de interferencia es, también, una manera de dsifrutar de estos escritos.
Un saludo desde el otro lado...
