Esta sábado, mediada la temporada 47 el
Míster Gierada ha cedido finalmente el mando del banquillo a su
pupilo Jonás Marsá.
Gierada ha sido el primer
jugador de la plantilla convertido en Entrenador, a excepción de
aquel Enrique del Valle de la primera plantilla que compaginaba ambas
tareas hasta la llegada del efímero Aldo Cerratti.
El bueno de Maciej llegó al
club el 3 de julio de 2007 (GMT) desde el FC Koskis, por 541.000
euros, al inicio de la temporada 21 (HUT), al día siguiente de que
el Propietario liquidara la plantilla tras el fracaso de la temporada
20. (Por segunda temporada consecutiva el equipo perdía el título
de VII y el ascenso por un punto siendo el máximo goleador y el
menos goleado del grupo con enorme diferencia... ¿ejeas?).
El enorme enfado que se
pilló el tipo sigue siendo uno de hitos de la historia del club que
se comenta, muy por lo bajo, en las peñas y tertulias...
Su historial como jugador:
145 goles y 10 HT en su
carrera.
Ha disputado 139 partidos
con el club marcando 62 goles , de ellos 34 en liga, 1 en copa y 27
en amistosos y torneos.
Consiguió un HT en Liga, 2
más en amistosos. Marcó el gol 400 del equipo en Liga. Y se
convirtió en el pichichi del equipo en las temporadas 22, 24 y 27.
Finalmente tiene una media de 0,45 goles por partido con el equipo a
lo largo de su carrera.
En su momento se convirtió
en el máximo anotador de la historia del club, puesto que mantuvo
varias temporadas hasta que lo superó su compañero y pupilo, Jonás
Marsá.
Acompañado entre otros de
los Albert Kivela, Oscar Vallejo y del jovencísimo Jonás Marsá,
fue una de las grandes apuestas de renovación del Míster italiano
Dario Mazzola, convirtiéndose rápidamente en el pilar de la
delantera y el capitán del equipo. Su relación con el entrenador
transalpino siempre fue buena y llena de confianza. Supo enfriar al
italiano y traducir sus explosiones a palabras más centradas y
pasarlas al equipo. Todo ello le granjeó un reconocimiento y apoyo
de la plantilla que se ha prolongado en su época de entrenador.
Se convirtió en entrenador
a primeros de octubre de 2010 (ver nota de prensa del 20/10/2010) a
mitad de la temporada 31 en una época realmente convulsa del club
tras el descenso que cerró la brillante época de 6 temporadas
consecutivas en VI (lo que se ha dado en llamar “6 en VI” cuyo
post se publicará en la sección de Historia del Club), y ante el
riesgo de descenso a VIII, que se concretaría finalmente.
Su palmarés tras 15
temporadas como entrenador incluye 2 títulos en VIII y 1 en VII
junto con otros 2 ascensos como 2º a VI.
En copa alcanzó la mítica
ronda 4 en la temporada 41, mejor resultado del club hasta el momento
igualando el del equipo en la temporada 27 entonces dirigidos por el
italiano Mazzola. Posteriormente con la implantación de las
“segundas copas” de consolación alcanzó un 2+3 en la temporada
44 y un 1+3 en la 45.
Con
él al mando el equipo ha militado 4 temporadas en la exclusiva VI,
con una racha de 3 temporadas consecutivas hasta esta última 45,
ganando por segunda vez (dos de dos) la permanencia, en esta suerte
de muerte súbita que es la Promoción.
E
igualando la mejor clasificación del equipo hasta la fecha, con un
4º puesto la temporada 44.
Su primera temporada, la 31,
fue una continua lucha por renovar el equipo y crear un nuevo estilo
y una nueva mecánica de juego. Muy a su pesar tuvo que dar salida
del club a auténticas glorias y mitos como Zdenek Nowak o Floris Jan
Van der Linj, por el bien del equipo. Finalmente se saldó con duro
descenso a VIII, pero el polaco sabía que no era sino un paso atrás
para coger impulso.
Efectivamente en la
temporada siguiente la 32 ganó la liga y consiguió el ascenso
directo a VII con unos resultados demoledores y 39 puntos de los 42
posibles, tan sólo 6 goles en contra y nada menos que 54 a favor en
los 14 partidos disputados.
Tras una temporada de
adaptación, en la siguiente, la 34 volvió conseguir el título y el
ascenso a VI, devolviendo al equipo a las glorias que en las
temporadas 25 a 29 ya lograra Darío Mazzola. La renovación estaba
hecha. (Nota de prensa 24/08/2013).
Quizás por su origen polaco
ha sido siempre un jugador y entrenador muy exigente, duro y algo
seco en el trato. Pero cuando hizo falta supo apoyar puntualmente a
jugadores concretos. Se ha hecho famoso por sus tremendas arengas y
charlas de vestuario en los momentos críticos de su carrera como
coach. (ver nota de prensa 26/04/2013)
Al tomar el mando del equipo
se apoyó en los defensas forjados en la época de Mazzola algunos de
los cuales han seguido en el equipo y han sido titulares hasta hace
poco Niznikowski, Bodale, Guardia... y sobre todo dio un gran impulso
a la sección juvenil, de la que supo sacar a los más brillantes
jugadores de la historia del club: los Gilbert, Fortuny, Carlos Ríos,
Zuleta, etc. Y otros que, en el momento de su retirada el banquillo,
están llamados a sustituirlos como Bernabeu o Molins.
Tras las primeras temporadas
y ante los pésimos resultados que le sirvieron para conocer las
posibilidades de aquella plantilla y las tácticas utilizadas hasta
ese momento, decidió apostar fuerte por crear un mediocampo
dominador que se convirtió en la base del equipo y de sus éxitos. Y
también en su gran fuente de ingresos por las ventas, entre otros
del canterano Ruiz del Arco o del argentino Claudio Ocaña Zahler.
Posteriormente, una vez
conseguido un mediocampo sólido, pudo dedicarse por fin a su
verdadera pasión y a lo que conocía bien de su época de jugador:
el ataque.
Utilizando el equipo juvenil
como base fue sacando poco a poco a jóvenes valores y comenzó a
potenciar su entrenamiento. Automáticamente las alineaciones
comenzaron a basarse en tres delanteros con diferentes alternativas
detrás desde la conservadora 4-3-3, pasando por una inteligente
3-4-3 con dos centro campistas muy fuertes y dos extremos que
alimentaban a la delantera que utilizó profusamente en las
divisiones más bajas.
Los éxitos del equipo les
catapultaron a la VI división donde la categoría de los rivales era
muy exigente y donde un medio campo de sólo dos jugadores empezada a
ser insuficiente. Por ello dio un paso más en la evolución natural
de esa apuesta por el ataque y adoptó la brillante y valiente 2-5-3
que se convertiría, finalmente, en su firma táctica y verdadero
santo y seña del equipo.
Con esta táctica que muchos
calificaron de suicida y que fue profusamente criticada dentro y
fuera del club, alcanzó los máximos éxitos y sobretodo mantuvo a
pesar de la propia lógica al equipo en la exigente VI división
hasta el mismo momento de su retirada.
Fruto de esta línea de
actuación aparecieron los jugadores con mayores puntuaciones en la
historia del club hasta ese momento, los Zuleta, Carlos Ríos, etc.
delanteros brullantes todos ellos fruto del trabajo con el equipo
juvenil.
De hecho Carlos Ríos se
convertiría en el jugador de campo más caro en la historia de las
ventas del club. Sólo superado por el mítico e irrepetible
Emmanuelle Brunelle, el cancerbero que marcó la historia del club
casi desde sus inicios.
Gracias a la cantera que tan
bien cuidó pudo nutrir al primer equipo de grandes figuras sin tener
que recurrir al mercado de fichajes. De hecho llegó a linear hasta 9
canteranos en algunas ocasiones.
Sólo en las últimas
temporadas, agobiado por la presión de la exigente VI división y
los ataques de parte de la afición se ha visto obligado a romper su
filosofía y salir a buscar fichajes, demostrando de nuevo su buen
ojo y acierto en lo económico con fichajes como los de Eznaurriaza,
el portero Carlos Armando Duarte, el holandés Thiemen Van Goethem o
el reciente Sven Danielsson, el mago del balón parado.
A pesar de ello, siempre
previsor y con una capacidad para la planificación muy
característica, a pesar de las voces que exigen los resultados
inmediatos aunque se trate de quemar naves, poco a poco fue
preparando su sustitución que por fin ha llegado, formando y
enseñando a su pupilo, ex compañero de delantera y sustituto
natural en la mitología del club, Jonás Marsá.
De él ha dicho siempre que
será uno de los más grandes entrenadores que jamás conocerá el
club igual que lo fue como jugador.
Incluso puso la semilla del
que probablemente acabe siendo el primer entrenador del club nacido
en la propia casa y criado en el juvenil: el joven y brillante
Ignacio Molins.
Finalmente, el 7 de marzo de
2015, final de la temporada 46,
tras el último partido oficial dirigido desde el banquillo, con la
victoria por 3-0 contra Serramitja's en la Promoción que mantenía
al equipo en VI, la máxima división alcanzada y con la conciencia
limpia y el orgullo del trabajo bien hecho, con la discreción y la
honradez que le han caracterizado siempre, apenas rodeado de sus
jugadores y en el viejo vestuario que tantas veces le vio calzarse
los borceguíes, se despidió y dio paso al futuro, recordando que
“la única manera
de disfrutar y hacer disfrutar a los espectadores, es ofreciendo la
máxima ofrenda que es el GOL”.
El
Propietario, desaparecido durante las últimas temporadas, le rindió
el homenaje que el equipo le debía con un último partido amistoso
contra el equipo LKS Polonia Miloszyce, de su amada Dolnośląskie
que le vio nacer y que un día, hace muchos años, le despidió, como
un joven de espeso pelo rizado y mirada enjuta y decidida con apenas
un hatillo con unas viejas y veneradas botas y toda la ilusión, para
que se hiciera grande en el mundo que se abría a sus alegres y
determinados pasos.
Los
jugadores le obsequiaron como mejor podían hacer, con un festival de
goles, 10-0.
Aún
continuó el resto de la temporada, así como la primera vuelta de la
siguiente (47) ayudando al nuevo entrenador, J. Marsá, hasta que
la autorización de la federación permitió al pupilo hacerse con
las riendas del equipo.
Y
su mano se vio en la brillante, aunque finalmente apurada, victoria
en copa en primera ronda de la temporada 46 y en la última victoria del equipo en liga ante Diablos FC: un equipo que marca
muchos goles nunca pierde el partido.
Si
bien no podrá estar en el Salón de la Fama oficial HT por estar
inactivo el paquete que lo soporta,
sí tendrá para siempre un asiento especial dentro del palco.
Eso
sí, por propia elección ligeramente retirado al fondo en un
discreto y tranquilo rincón, con vista perfecta de la portería
donde se marcan los goles...