Este
sábado, tras la difícil y trabajada victoria contra Tárragas, en
un partido que puede ser esencial a final de temporada, se hizo
pública la retirada de Gervasi Fortuny: el primer canterano que ha
triunfado en el equipo al más alto nivel y el más longevo hasta el
momento.
Fortuny,
con apenas 17 años entonces, pertenece a la primera plantilla de
DaniFalkis, basada principalmente en los chicos del Colegio de las
Acogedoras y Reverendas Madres Clarisas de la Buena Fe cuya ubicación
junto al Coliseum les hacía ser el vivero natural del equipo.
Baldomero
Queaires, entrenador y ojeador de los juveniles de Falkis vio desde
el principio un talento especial en este chico fuerte y de buena
planta, pero que se mostraba huraño y antipático con casi todos.
A
pesar de que sólo había pasado 2 temporadas en el juvenil con
apenas 6 estrellas en mediocampo y unos discretos 11 goles,
finalizando la temporada 28 Baldomero le ofreció al técnico
italiano Mazzola ascender al chico a la primera plantilla y este lo
rechazó inicialmente por su carácter. Entonces el bueno de
Baldomero le dijo aquella frase que luego ha quedado en la historia
de Falkis: “Todos los genios viven en su mundo apartados del de
los demás, hasta que se les reconoce...”. Mazzola, criado en
el país que más genios artistas ha dado, comprendió que tenía
razón y ascendió al muchacho de 19 años de inmediato.
En
aquel momento el equipo estaba reconstruyéndose de la Gran
Liquidación de un par de temporadas antes y necesitaba buenos
centrocampistas jóvenes que fueran preparando la sustitución de los
veteranos: Floris Van der Lin, Prátola, García, Gasperini,
Prenkpalaj... Protegido por los míticos Christer Rogersson y Oscar
Vallejo debutó junto a su compañero de DaniFalkis, Rabascall, unos
días después en diciembre de 2009.
Tras
un largo proceso de formación en los partidos amistosos que le fue
templando el carácter poco a poco, en la temporada 32, con el Coach
Gierada ya en el banquillo, alcanzó la titularidad.
A
pesar de los grandes fichajes que llegaban, (Ocaña Zahler, Bertoni,
etc.), poco a poco el inteligente Gierada fue formando junto a otros
jóvenes canteranos lo que luego sería la tripleta de medio campo
más famosa y que más grandes logros a dado al Club: Gilbert,
Fortuny y Winifredo Sanez. Y que fueron la base del equipo en el que
los grandes delanteros venidos del filial (Zubiaurre, Ríos, Zuleta,
etc.) se apoyó para dar las temporadas de mayor esplendor de Falkis
en VI.
Su
compenetración con los Gilbert y Winifredo, que siempre le tuvieron
como su líder, fue perfecta y obtuvieron muchos éxitos en VI además
de incontables ascensos.
Posteriormente,
cuando la dupla Marsá-Gierada volvió a apostar por el mediocampo
como terreno de entrenamiento no tuvo problema en convertirse en el
referente de los Pinilla, Ludolfinger, Aneiros, Parra Ruiz, etc.
cediendo el protagonismo a los Danielsson, Van Goethem, Eznaurriaza,
Bronte o últimamente a los Scholz, Gangneux o el exótico Woon Shu
An.
Su
amor por el filial y su conocimiento del mismo le ha valido para que
el Club le haya nombrado responsable máximo de la Academia Falkis
bajo la que se incluirá el juvenil así como futuros equipos de
categorías inferiores en distintas partes del mundo, un proyecto
impulsado junto a Baldomero Queaires, su padre futbolístico y Jonás
Marsá, actual entrenador y compañero de equipo durante tantas
temporadas.
Se ha
dicho casi todo de él y su retirada era un rumor constante en las
últimas temporadas. De hecho el jugador ha desvelado que al
finalizar la temporada 48 ya quiso dar el paso, pero que el
entrenador Marsá, tantos años compañero y aprendiz suyo, le pidió
que siguiera por ser un referente en la plantilla.
Como
jugador alcanzó en su momento, temporada 38, la máxima calificación
obtenida por un centrocampista del equipo con 8,5 estrellas. Logro
que sólo Gilbert, otro canterano, alcanzaría después.
Mediocampista
elegante, especializado en el ataque, con un magnífico toque y una
visión rápida para los desmarques de los compañeros, también se
caracterizó por su capacidad goleadora, con un tiro fácil y
colocado, una tremenda habilidad para definir en el área y sobre
todo un magnífico juego de cabeza.
Ha
sido hasta la fecha el máximo goleador de la historia del equipo
junto a Jonás Marsá con 110 goles. Siendo el máximo goleador en
Copa, (11 goles y único jugador en pasar de los 10, habiendo
marcado el gol 100 del equipo), en Amistosos con 43 goles y anotando
el gol 500 en esta lista.
Consiguió
el Pichichi de la Liga en la temporada 44 con 11 goles.
Ha
anotado 3 Hattricks en liga, uno de ellos con 4 goles, y otro más en
la Copa Esmeralda.
Su
retirada con más de 40 años y tras 22 temporadas, lo que le
convierte en estos momentos en el jugador más longevo en el equipo,
es uno de esos momentos en que la historia de Falkis se detiene para
disfrutar de su esencia, de aquellos chicos de ese humilde colegio
que a la sombra del estadio sueñan con emular a los mitos Brunelle,
Moldovan, Sunesson, Gierada o Marsá y un día, casi sin darse cuenta,
entran a formar parte de esa lista exclusiva como si sólo hubiese
sido un corto sueño, de una vida en Falkis jugando al balón.