domingo, 30 de abril de 2017

Partido de Promoción a V: El camino a la gloria


Tras el esfuerzo en el último partido de liga frente al difícil Racing de Palma, con la brillante victoria por 1-4 que dejó al equipo a las mismas puertas del ascenso directo por apenas unos goles, el Míster Marsá consiguió mantener al equipo concentrado en el difícil partido de promoción.

Un rival realmente difícil, con una defensa como nunca había encontrado enfrente el equipo y con un contraataque muy fuerte en las bandas y que además jugaba en casa, no parecía el hueso ideal para intentar la proeza.

La controversia y las opiniones a lo largo de la semana hacían muy difícil poder centrarse en el equipo ideal y las críticas estaban a flor de piel.

No obstante el Míster tras un profundo análisis y el estudio de todas las alternativas -control, defensa, etc- acabó por apostar por lo que es el santo y seña, el ADN, de este equipo: Mediocampo y Ataque.
Los campeones son los que ganan los partidos” había dicho a lo largo de la temporada.
Y como dijera el mago holandés, “para ganar un partido sólo tienes que marcar un gol más que tu rival”.

El día del partido se preveía lluvioso y por ello Marsá confió en la potencia de los Gomila, Pinilla, Neufus... No obstante y fiel a su carácter y su genialidad decidió apostar por el certero Danielsson a pesar de su menor capacidad física en estos terrenos, frente al brillante Woon Shun. Cada oportunidad de balón parado podía ser la clave para el éxito. Y sabedor de la determinación y personalidad del sueco, que ya ha demostrado en tantos partidos definitivos, puso en él todas las esperanzas. Y además el internacional de Singapur, Woon Shun, podía ser en un momento dado un as en la manga.

Por otro lado apostar descaradamente por una delantera de 3 incluyendo junto al descarado Ratoncito Bernabeu y al jugador quizás más brillante actualmente de la plantilla, el infalible Gomila, al capitán Molins que apura la temporada con las últimas gotas de combustible en la reserva, parecía una estrategia arriesgada. Pero Marsá, como antes Gierada, que conoce bien lo que es el ser el artillero y capitán del equipo, confió en la importancia del liderazgo del 29 del equipo, sin duda prometedor heredero de estos grandes capitanes, arietes y a la postre entrenadores.

Finalmente apostó por una 2-5-3, esa táctica arriesgada pero espectacular que ha conseguido elevar al Olimpo de Falkis, por encima de críticas y recelos, a base de resultados. Confiando en retaguardia en el espectacular Hajiabadi, al que el final de temporada le llega en un momento de plenitud producto de su perfecta adaptación al equipo, resguardado por el trabajador central Neufus, ligeramente orientado a la derecha banda vacía, y el solvente Engler, que arrastra al equipo cuando hace falta, como lateral izquierdo . Una labor difícil y trabajosa para estos tres baluartes.

Y po último el mediocampo de lujo habitual con los tres mosqueteros canteranos -Aneiros, Parra Ruiz y Pinilla- escoltados por el elegante francés Gangneux y el fiable Danielsson.

Y con este equipo de “Woon Shunes y Pinillas”, como se ha dado en llamar a esta mezcla de galácticos fichajes veteranos y brillantes canteranos, saltó al campo a perseguir el sueño jamás soñado: el ascenso a V. El camino que nos enseñara el maestro Angel_ito.

Pero no eran once jugadores solos ante la batalla. En las gradas “Los Dragones”, ya bien metidos en el tercer milenio -es decir más de 2,200- y miles de aficionados, habían acompañado al equipo. Entre ellos los ocurrentes e incansables Ratoncitos, especial club de fans del carsimático Bernabeu, incluidas las famosas Minnies Cheerleaders.

Y junto al banquillo el talismán del entrenador Marsá en esta segunda vuelta de esta crucial e histórica temporada, su adolescente hija Chispita, una especie de Sheryl Yoast, de los Titanes, en clave Hattrick.
Hasta los genios necesitan algo de suerte.

Por fin, el balón echó a rodar y pronto se observó que el rival había sido fiel a su estrategia del 4-4-2, sacrificando el centro de la media por los extremos y la fuerte defensa, incluso en las innecesarias bandas. Los primeros compases apuntaban al dominio de Falkis en el mediocampo sobre el 60% pero quizás algo menor a lo esperado y a su determinación de atacar por el centro donde su sobrenatural habilidad es ya reconocida. 
La buena noticia era que la lucha en esta parte del campo era para el rival pero por sólo un 5%. 
La mala era que los laterales del área de Falkis eran ampliamente para New Team.
¿Se habría equivocado el Míster?. ¿Había sido demasiado osado y ambicioso?.

A pesar del dominio los minutos transcurrían sin ocasiones y el balón bien jugado en el medio no llegaba a los tres delanteros.

En el minuto 15, el primer ataque de New Team por la banda derecha era rematado a placer en el segundo palo por un jugador sin marcaje. Lo peor empezaba a pasar. Los ojos críticos miraban al banquillo preparados para denunciar la falta de defensa. 1-0.

Marsá apretaba el gesto, pero transmitía tranquilidad al equipo. Fe en la estrategia y en el concepto del juego. Paciencia, su palabra talismán.

El mediocampo volvió a tomar la posesión del balón y a moverlo con facilidad y poco a poco fue haciendo patente su dominio. 
Pero las ocasiones seguían sin llegar.

No obstante, la pesadilla estaba acechando y en el minuto 29 un rápido contraataque por la banda izquierda apenas protegida, ponía al rival en disposición de rematar ante el solitario Hajiabadi que hizo una estirada impensable... pero no fue suficiente. 
Felizmente el balón se estrelló estruendosamente en el poste y salió fuera.
La única ilusión era que se tratara de la suerte de los campeones, pero el equipo necesitaba remontar cuanto antes. El rival se crecía empujado por su afición. Dragones y Ratones parecían petrificados. Las cosas no pintaban nada bien.

Los tres mosqueteros de Falkis sacaron todo su repertorio y consiguieron volver a hilar jugadas. 
Hasta que por fín, el siempre fiable Gomila, desplegando su calidad de 9 estrellas y media, cortaba por el centro de la zaga rival para encarar al guardameta y batirle con un colocado tiro cruzado. 1-1, era el minuto 34.

Con el equipo revivido y las gradas alentándole, apenas cuatro minutos después el Gran Capitán Molins tiró de galones y sabiduría para robar un balón a la defensa rival y anotar fácilmente el 1-2.

El descanso paró la reacción del equipo y permitió coger algo de fuelle para una segunda parte que se presentía épica e histórica. Dos equipos en busca de la V.

Entre tanto la duda sobre si la lista de los tiradores de penalty -para el hipotético caso de un empate final- había llegado al colegiado, se convirtió en la noticia con que se trataba de desestabilizar al equipo.
Marsá consiguió centrar a sus jugadores de nuevo en el partido, para jugar como sabían y evitar cualquier problema.

La segunda parte se inició con dominio de Falkis pero sin apenas ocasiones. Aguantar el resultado tampoco parecía mala táctica.
Si un equipo no tienen el balón, no puede marcar un gol”, de nuevo la sabiduría del genial 14 holandés parecía la biblia a seguir.

En el minuto 60' el rival, con apenas media hora por delante para remontar, se veía obligado a realizar el primer cambio y algún ajuste en el centro de la defensa y cambiaba a un 3-4-3 reforzando aún más su delantera con la esperanza de convertir nuevos contraataques.
Pero apenas un par de minutos después, la acertada delantera de Falkis aprovechaba la situación para sacar partido de la soledad del único defensa central y con una bonita pared dejaba sólo a Molins ante el portero. Y de nuevo, el Pichichi de esta temporada, hacía honor a su capacidad y ponía el tranquilizador 1-3 en el luminoso. Era el minuto 62.
Molins, aun en baja forma, es mucho Molins y ante la delantera de Falkis mejor no hacer experimentos”, comentó el experto de Falkis TV, Masblinis al ex jugador Torpe Valdado.

De inmediato y con dos goles de ventaja, Marsá sacó la chistera y reajustó al equipo: Parra dejaba la media punta y se sumaba a la labor del centro del campo y así podía retirar a Gangneux para dar entrada en el lateral derecho al insuperable Chaturvedi. Así el equipo sin apenas perder mediocampo reforzaba la defensa con un sorprendente 3-4-3. Una jugada genial del genial entrenador, como nos tiene acostumbrados.

Como consecuencia apenas un par de minutos después, en el 64, Gomila volvía a entrar solo por el cetro regateando con su demostrada habilidad a cuantos le salían al paso y tras sortear al guardameta afrontaba la portería vacía. Pero el mal estado del terreno le hacía resbalar perdiéndose la ocasión de rematar el partido.

Un minuto después el capitán contrario, fruto del tremendo esfuerzo, tenía que retirarse lesionado seriamente en la rodilla. Dado que su posicion era en el lateral derecho el cambio apenas influyó en el estado del partido.

En el minuto 75, con sólo 15 minutos restantes, de nuevo el rival reajustaba sus líneas apostando por reforzar el mediocampo en detrimento de la defensa, pasando a un valiente 2-5-3 a la desesperada.

Pero en el minuto 77, Sven Danielsson el veterano y confiable mediocentro hoy sacrificado como extremo de apoyo, sacaba fuerzas de flaqueza en un terreno totalmente adverso y callaba muchas críticas con una escapada por la banda para lanzar un acertado disparo desde el borde del área que entró en la escuadra contraria como una exhalación. 
Era el 1-4.
Su inmediato gesto al entrenador en el banquillo, era un bonito agradecimiento y reconocimiento de la sabiduría y del acierto del Míster al darle la confianza como titular en un partido tan crucial.

De inmediato Marsá ordenó el último reajuste otorgándole al capitán Marsá el bonito homenaje de toda una afición aclamándole con su reconocimiento, al ceder su brazalete a Neufus y su puesto al galáctico Woon Shun An que se incorporaba al extremo derecho para permitir que Danielsson, el versátil, pasar a la parte izquierda del centro de la defensa para ayudar a un agotado Engler en aquella banda. 
Era una nueva y sorprendente 4-4-2 para asegurar los últimos 13 minutos de partido.
De este partido tan importante.

Los minutos finales fueron un control total de Falkis entre un clamor ensordecedor de la afición consciente del inmenso logro.

El pitido final del árbitro desató la euforia y disparó las emociones:
Aficionados veteranos y noveles llorando juntos; el cuerpo técnico echo una piña; el Míster abrazado a su mentor Gierada y al capitán Molins -¡qué tendrán estos arietes de Falkis que aunan calidad, acierto y liderazgo-; reservas y titulares festejando con los jugadores vestidos de calle en la grada; los chicos de DaniFalkis mirando con cara de asombro y unos enormes ojos a sus abuelos preguntándose si era verdad, que ya eramos equipo de V...

Y todos y cada uno de los trabajadores y personal del equipo en el estadio en vivo, en el Coliseum a través de las pantallas gigantes, en el autobús con la radio, en las cocinas con los móviles o en las oficinas con las tablets y ordenadores, sabiendo que en pocas horas la fiesta sería el final de una gran temporada y el principio de todo un futuro...

En medio de todo ello, por un segundo el Propietario, en un momento de lucidez instantánea nada habitual, tuvo un ligero recuerdo para todos los supporters y amigos que lo fueron y todos aquellos jugadores, entrenadores, patrocinadores, etc. que han pasado por el Club y que han puesto su granito de arena en este logro inimaginable.

Algo habría que hacer al respecto...


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Increíble proezas de Falkis. Un premio a la constancia, el arrojo y la genialidad. Un puñado de Heroes de nombres ya míticos hicieron que el corazón de sus fans reventara de orgullo con sus colores, el verde de la eterna esperanza y el blanco impoluto... Hasta que llega la hora de la batalla.
En este rincón alejado un puñado de fans corearon los cariñosos apodos de sus ídolos,las eternas leyendas como Gozmilla, Pipi Pinila, y Neuflix, o los jóvenes Chuwi y Berni, presente de un linaje brillante.
Incluso algunos aseguran que vieron la emoción en forma de húmedos ojos en el imperturbable rostro del viejo Mister Ito (misterito), sin duda orgulloso de que Mafonia siga encumbrada en la élite HT.
Enhorabuena, Falkis, IV está en el horizonte!

manol_ito dijo...

Fantástico comentario, digno del autor. (?)
Estas son las aportacioens que engrandecen y enrriquecen el blog del Equipo.
Buenísimos los "motes" de los jugadores, nada como akguien desde la grada que nos dé otra perspectiva. ... auqnue Chuwi se me escapa... jajaja
El verde, el blanco y ahora más que nunca el oro !!! (el maldito y caro supporter no nos deja enseñar el uniforme con los tres colores...
Mafonia siempre !!!
Lo de la IV está efectivamente en el horizonte, es decir inaccesible, jejejeje.
De momento a disfritar el ahora.
Mil gracias y pronto nuevas noticias para seguidores fieles como tú !!!